sábado, 8 de mayo de 2010

III"DEL ARTE, LA COMUNICACIÓN Y LA INTERVENCIÓN COMUNITARIA CON LOS PUEBLOS ORIGINARIOS"

UNIVERSIDAD NACIONAL DE SALTA
FACULTAD DE HUMANIDADES
Postitulo en Educación Rural e Intercultural
SECRETARIA DE EXTENSION UNIVERSITARIA

Del arte, la comunicación y la intervención comunitaria
con los pueblos originarios
El curso propone: Conocer, comprender y reflexionar sobre el arte, la comunicación y la intervención comunitaria con pueblos originarios de este continente, a fin de elaborar y desarrollar propuestas de animación sociocultural que incluyan investigación y participación.

Contenidos: Comunicación Comunitaria: caracterización. Radios Comunitarias: la voz del pueblo indígena. Pautas para la elaboración, redacción y evaluación de proyectos comunitarios.
Análisis de intervenciones sociocomunitarias en La Puntana, La Curvita (Dpto. Rivadavia), San Carlos, Animaná (Valles Calchaquís) y Departamento San Martin.
Arte, artesanías y diseño: perspectiva sociohistórica sobre sus diálogos, conflictos y desplazamientos. Interpelaciones latinoamericanas al concepto eurocéntrico de arte. Incidencia de lo indígena y lo africano en la plástica contemporánea.
El acceso al conocimiento social: notas de campo y posibilidades de generación de teoría en un contexto de descubrimiento. La búsqueda de nudos semánticos, creación de categorías analíticas y problematización de los conceptos construidos.

Bibliografía:
Alfaro Moreno, R. M., 2007, Comunicación y Política en una democracia. Veeruria ciudada. Lima

Beltrán, L. R., 1995, Comunicación para la democracia, la radio popular y educativa de América Latina, recopilación de ponencias realizadas en el Festival de Radioapasionados y Televisionarios de América Latina y el Caribe, Ecuador, CIESPAL.

Bovisio, Ma. A.,2002, Algo mas sobre una vieja cuestion: Arte ¿vs? artesania. Buenos Aires: Telefonica/Fundacion para la investigacion del arte argentino.
Bourdieu, P.1979, La distinción. Madrid. Taurus.
Freire, P., 1973, ¿Extensión o Comunicación? Buenos Aires, Siglo XXI
1970, Pedagogía del oprimido, Mexico, Siglo XXI.

Gumucio-Dragón, Alfonso, El nuevo comunicador (fragmento policopiado)

Mendez, L., 1995, Antropología de la producción artística. Madrid, Síntesis.

Núñez, Violeta. 1999. Pedagogía Social: Cartas para navegar en el nuevo
milenio. Buenos Aires. Santillana.
Pasquali, Antonio. Comprender la comunicación. Caracas, Monte Ávila Editores, 1990.

Rocca, Ma. Cristina, 2009, Arte, Modernización y Guerra Fría. Universidad Nacional de Córdoba.

Smucler, H. y Mata Ma. C., 1995, Política y Comunicación. Catálogos, Universidad Nacional de Córdoba.

Uranga, W., 2007, “Prospectiva estratégica desde la comunicación;
procesos metodológicos de diagnóstico y participación”, Bs. As.

Velasco, H. (comp.), 1998. La cultura y las culturas. Lecturas de Antropologia
Social y Cultural. Madrid, UNED.


Docentes:
Lic. Liliana Lizondo, Licenciada en Comunicaciones Sociales. Docente e Investigadora de La Universidad Nacional de Salta, Sede Central y Sede Tartagal. Promotora y directora de Radios Comunitarias.

Mag. María Cristina Rocca, Magister en Arte Latinoamericano (Universidad de Cuyo) Licenciada en Letras, mención Historia del Arte (Universidad de los Andes, Venezuela, 1984). Docente e investigadora de la Escuela de Artes, Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Nacional de Córdoba.

Lic. Estela T. Soto. Licenciada en Antropología. Investigadora y docente en Universidades argentinas y del Paraguay. Premio Investigación Alicia Moreau de Justo. Sobre el tema del Seminario ha dictado numerosos cursos y cuenta con Publicaciones Nacionales e Internacionales.

Lic. Adriana Zaffaroni. Licenciada en Sociología. Docente de las Universidades de Buenos Aires y de Formosa. Actualmente se desempeña como investigadora y docente de la Universidad Nacional de Salta. Autora de libros y artículos de la especialidad.


Cronograma:

Reuniones : sábados 8 de mayo y 5 de junio de 8.30 a 18.30 hrs.
Taller de lectura optativo: 15 de mayo de 8.30 a 12.30 hrs.
Taller de análisis de notas de campo: 12 de junio de 8.30 a 12.30 hrs.
Tutorías presenciales y a distancia: desde el 8 de mayo al 30 de junio
Evaluación final: 3 de julio
Informes: CISEN, 2do. Piso de la Facultad de Humanidades. UNSa., Complejo Universitario General San Martín. Avda. Bolivia 5155. TE: 0387 4255551/61
Mail: angelesbensi@yahoo.com.ar, www.postitulorural.bogspot.com


II"DEL ARTE, LA COMUNICACIÓN Y LA INTERVENCIÓN COMUNITARIA CON LOS PUEBLOS ORIGINARIOS" II

EL NUEVO COMUNICADOR
Por Alfonso Gumucio-Dragón

Cualquier plan para un futuro cambio social debería reunir en una estrategia el objetivo del cambio social, el conocimiento de nuevas tecnologías y el proceso de comunicación. Ninguno de ellos sólo puede lograrlo, y los tres juntos tampoco pueden si el factor humano no es una parte esencial de la reflexión: el nuevo comunicador debería ser la pieza central de las estrategias de comunicación en el nuevo siglo.

El cementerio del desarrollo

Un triste panorama crece en muchos países del Tercer Mundo. Entre más invertimos en desarrollo, más contribuimos al crecimiento del cementerio del desarrollo, esa impresionante imagen de computadores cubiertos de polvo, que sólo funcionaron pocos meses, bombas de agua que sólo duraron uno o dos anos, inmensa maquinaria abandonada a la orilla de carreteras que nunca fueron terminadas.

En una pequeña población de Burkina Faso vi el edificio recién construido de un hospital que nunca abrió sus puertas debido a la falta de enfermeras y médicos. He visto dos mil buzones de correo oxidándose bajo la lluvia en una aldea de quinientas familias analfabetas, que ni recibían cartas ni las escribían. Vi agua derramarse durante meses (en las calles se había formado un camino de hongos) de una fuente en una aldea en la árida zona del Sahel, al sur del Sahara, porque nadie estaba dispuesto a gastar los tres dólares necesarios para comprar el repuesto de la llave. He visto costosos y sofisticados buses OB (estudios móviles de televisión) abandonados durante anos, porque sus llantas estaban desinfladas. En Nigeria, UNICEF donó al gobierno más de mil jeeps y camionetas de doble tracción para las campanas de vacunación de 1988-1990, de los cuales hoy muy pocos están funcionando. Los patios del Ministerio de Educación en Haití parecen cementerios de automóviles; jeeps nuevos, donados por las agencias de cooperación internacional, están apilados allí, después de haber sido virtualmente destruidos en accidentes o debido a una absoluta falta de mantenimiento.

Quien haya trabajado en países en desarrollo podría exhibir una lista similar o aun más larga. Y cualquiera que haya trabajado con agencias internacionales de desarrollo o ONGs, sabe que estas cosas suceden todos los días y que a menudo nos vemos obligados a cerrar los ojos para evitar “conflictos” con los gobiernos con los que se trabaja. Obviamente, la corrupción hace parte de esto, y el sistema internacional del desarrollo, llámese Naciones Unidas, USAID, o cualquier otro de los nombres, ha estado escondiendo –de una forma u otra- las implicaciones que esto tiene para el desarrollo social.

Los retos de la propiedad comunitaria

Casi todo el mundo –desde las más pequeña ONG con raíces en la comunidad hasta los gurús del Banco Mundial en Washington- parecen estar de acuerdo en que los proyectos fallan si las comunidades no participan en ellos, si la naturaleza de los proyectos fue decidida sin alguna forma de diálogo con la comunidad de los llamados “beneficiarios”. Proyectos verticales no son sensibles hacia los aspectos sociales y culturales de la realidad. Si no se fomenta la participación, las comunidades serán pasivas frente a los proyectos de desarrollo, que supuestamente mejorarán sus condiciones de vida. Las comunidades no tendrán un sentido de propiedad sobre proyectos que han sido decididos e implementados en un esquema de arriba hacia abajo.

Un sistema de riego fue instalado por técnicos de una agencia del gobierno, con el apoyo de una agencia internacional de desarrollo. ¿A quien le pertenece el proyecto? Existen al menos tres escenarios: a) el proyecto nunca incorporó a nadie de la comunidad, b) la comunidad sólo fue invitada a “contribuir” con trabajo, o c) una vez que el proyecto estaba casi concluido, se invitó a la comunidad a “organizarse” y apropiarse de él.
Es obvio que a partir de estos tres escenarios lo mas probable es que obtengamos un proyecto no sostenible. En el mejor de los casos, la comunidad enfrentará el reto de la nueva responsabilidad, pero no estará preparada para ella. Cuando se dañe la primera bomba de mano, la gente simplemente esperará hasta que alguien del gobierno venga a repararla.

La participación de la comunidad no puede “arreglar” los problemas a posteriori (no puede ser impuesta a posteriori), debería ser un componente del proyecto tan importante como la financiación y debería desarrollarse al mismo tiempo que el proceso de financiación. Si no hay fondos, no hay proyecto en el corto plazo. Si no hay participación, no hay proyecto en el largo plazo. En realidad, la participación es la forma que tiene la comunidad de contribuir a la financiación del proyecto.

Todos parecen saberlo. Cualquier publicación de las agencias de la Naciones Unidas o de las agencias bilaterales de desarrollo resalta la importancia de la participación comunitaria y de que la comunidad sea la dueña del proyecto. ¿Cuántas de estas agencias ponen en práctica en los procesos reales a nivel de la comunidad, lo que está en el papel? La mayoría simplemente no sabe cómo hacerlo. La participación de la comunidad podrá ser la más nueva tendencia en el desarrollo (aunque las ONGs han estado trabajando así desde hace anos) pero en gran parte se trata de palabras, no de hechos. Podrá ser parte de las políticas del Banco Mundial o del UNDP en los países en desarrollo, pero no existen mecanismos que garanticen que se lleve a cabo.

Para principiar, pocas agencias tienen en el campo a personas que tengan conocimientos y experiencia en participación comunitaria. La mayoría de ellos simplemente improvisan, añadiendo simplemente las tareas de comunicación y participación a la descripción del trabajo de todo profesional, sin tener en cuenta su preparación académica o su experiencia. A menudo, la responsabilidad se le entrega a expertos que pasan la mayoría del tiempo volando de un continente a otro, asistiendo a importantes reuniones de programas, leyendo y redactando agudos documentos llenos de recomendaciones, pero quienes son personas con poca o ninguna experiencia de trabajo a nivel de la comunidad. A ellos se les escapa totalmente la dimensión cultural del desarrollo.

Una rápida mirada al perfil del personal de campo en la mayoría de las organizaciones de desarrollo muestra que si hay alguien a cargo del aspecto “participación”, se trata por lo general de alguien de un bajo nivel profesional. Es por esto que muchas organizaciones a menudo dependen de ONGs en el aspecto “participativo”. Pero aun en el mundo de las ONGs, ¿cual es el perfil del “experto” en participación? ¿Cómo son reclutados los especialistas? ¿Cual es su formación? Para entender la participación, un profesional de las ciencias sociales, la educación, la antropología o la sociología puede estar mejor preparado que un ingeniero. En algunas pocas agencias internacionales, como UNICEF o FAO, hay comunicadores a cargo del componente participación de la comunidad. Este es, por lo menos, un reconocimiento del papel de la comunicación en el desarrollo. El problema es: ¿cual es el perfil de los “comunicadores” en la mayoría de las agencias de desarrollo?

Información y Comunicación

Al principio de la década de los noventa, UNICEF se dio cuenta de que sus funcionarios encargados de información y comunicación eran contratados bajo unas 50 categorías diferentes, que iban desde el directo (explícito) encargado de “comunicación” o de “información”, hasta funcionarios de “movilización social” , “abogacía”, “comunicación de apoyo al desarrollo”, “movilización de la comunidad”, “mercadeo social”, “comunicación para el desarrollo”, “medios”, “relaciones externas”, “relaciones públicas”.

Aún la distinción entre “comunicación” e “información” no es clara para muchos. Es verdad que la palabra “comunicación” es un concepto más amplio, que contiene todos los otros, pero también es importante señalar la diferencia entre el proceso de una vía (información) y el de dos vías (comunicación). Ayuda, por lo menos, a comprender la diferencia entre periodistas y comunicadores.

Los periodistas son a menudo descritos como especialistas en comunicación. Por lo general se desconoce que el trabajo de comunicación cubre un muy amplio rango de destrezas que un periodista no ha sido preparado para manejar. Un periodista ha sido entrenado para trabajar con los medios, para escribir, hacer reportajes, producciones para radio, televisión y prensa. Al nombrar periodistas en puestos que están diseñados para especialistas en comunicación, las agencias ya están tomando la decisión de trabajar en su mayoría con los medios.

Sin embargo, hay pocas posibilidades de escoger. Hay miles de periodistas pero muy pocos especialistas en comunicación. Las escuelas de periodismo se cuentan por cientos en todo el mundo, y cada una produce docenas de periodistas o relacionistas públicos al ano. Por otro lado, no hay escuelas para estudiar comunicación. Muchas universidades decidieron cambiarle el nombre a sus escuelas de periodismo, pero los contenidos siguen siendo casi los mismos en las aparentemente nuevas “escuelas de comunicación social”.

Muy a la ligera, información ha sido fusionada con comunicación. En realidad, es importante recordar que –de acuerdo a su origen etimológico- comunicación es participación.

El nuevo comunicador

Un nuevo comunicador es usualmente alguien que le debe por lo menos el 50% de sus cualificaciones a un amplio rango de experiencias que poco tienen que ver con su formación académica. Lo que en realidad distingue al “nuevo comunicador” es una mezcla de experiencia en desarrollo, una especial sensibilidad para trabajar con las comunidades, y el conocimiento de las herramientas y tecnologías de la comunicación. El nuevo comunicador tiene que encontrar un equilibrio entre una forma muy práctica de enfrentar la realidad social, y la capacidad de elaborar y conceptualizar estrategias.

La formación académica es en cierta medida irrelevante, dado el hecho de que no hay instituciones que den un entrenamiento especifico de este tipo. Educadores, antropólogos, agrónomos a menudo se convierten en buenos comunicadores, cuando a la experiencia en desarrollo y participación comunitaria que han adquirido en el campo, le añaden el conocimiento sobre el proceso de comunicación y las destrezas para manejar tecnologías de información. Periodistas tienen ese conocimiento, aunque limitado a los medios, pero también ellos pueden convertirse en buenos comunicadores –enriquecídos por una visión holística de la comunicación- si adquieren experiencia en desarrollo y trabajo con las comunidades.

Esto no quiere decir que solamente comunicación interpersonal es necesaria en el contexto del cambio social. Una aproximación basada en la comunidad es a menudo el resultado de una total falta de acceso a los canales de información. Puede ser la única estrategia posible dado el extremo proceso de marginalización en que se encuentran muchas comunidades. No obstante, las nuevas tecnologías han abierto recientemente posibilidades enormes en términos de intercambios culturales horizontales, que tanto individuos como comunidades pueden establecer alrededor del globo. El significado de comunidad puede ser ampliado a grupos que tienen intereses comunes, aunque pertenezcan a culturas diferentes. Gradualmente se le ha permitido el acceso a grupos e individuos (o ellos se lo han tomado por asalto) que anteriormente estaban marginados.

El uso de medios electrónicos para el cambio social ha sufrido ya una impresionante evolución. Desde los anos 50, asociaciones, uniones, grupos comunitarios o ONGs han enfrentado las redes dominantes de radio y televisión con pequeñas estaciones que cubren comunidades específicas. Mientras trusts cada vez más grandes están concentrando el control sobre los medios masivos de comunicación en el mundo, redes alternativas de información y comunicación están floreciendo, a menudo con el apoyo del uso de Internet.

Los retos a la comunicación están evolucionando constantemente, en la medida en que aparecen nuevas posibilidades pero también nuevas necesidades. El nuevo comunicador tiene la capacidad de navegar de un medio a otro, de escoger entre las muchas herramientas de comunicación y adaptar las estrategias a una situación particular. Su experiencia abarca desde ayudar a fortalecer organizaciones sindicales hasta cubrir temas sociales para estaciones de medios, diseñar estrategias de participación para proyectos de desarrollo a nivel comunitario, facilitar la formación de redes entre las organizaciones no-gubernamentales y/o producir materiales de educación. Esta flexibilidad en el uso de estrategias de comunicación en varios contextos culturales da una capacitación sin igual.

Las siguientes podrían ser las principales premisas del nuevo comunicador:

1. El nuevo comunicador debe comprender que la tecnología es una herramienta y nada más que una herramienta. La tecnología puede apoyar el proceso de comunicación, pero este no puede depender totalmente de ella. También, es importante comprender que la tecnología no sólo implica computadores, satélites e Internet. Un lápiz es un maravilloso producto de la tecnología y técnicas de comunicación que han demostrado su eficacia van desde el teatro popular hasta los murales comunitarios.

2. El nuevo comunicador debe entender profundamente que la comunicación para el cambio social trabaja esencialmente con culturas y que se necesita una sensibilidad muy especial para apoyar el proceso de cambio social en el mundo en desarrollo, que no tiene nada más a que aferrarse que a su identidad cultural. Desarrollo y cambio social deben ser posibles dentro de un proceso de intercambios culturales horizontales y respetuosos.

3. El nuevo comunicador debe estar familiarizado con el siguiente concepto: en comunicación para el cambio social el proceso es más importante que el producto. En periodismo, los artículos, los documentales de video o los programas de radio son resultados valiosos para un profesional experimentado. Pero en cambio social y desarrollo, el proceso de comunicación con la gente y dentro de las comunidades es más importante que las ayudas impresas o audio-visuales que puedan surgir de esa dinámica. Es en el proceso de comunicación y participación que se inicia el cambio social.

I "DEL ARTE, LA COMUNICACIÓN Y LA INTERVENCIÓN COMUNITARIA CON LOS PUEBLOS ORIGINARIOS"


COMPRENDER LA COMUNICACIÓN- FRAGMENTOS

Antonio Pasquali

A fines de la década del ´70 el venezolano Antonio Pasquali escribió Comprender la comunicación, libro que desarrolla la diferencia conceptual entre “comunicación” e “información”. En ese recorrido, se destacan la noción de diálogo como intercambio bivalente entre las personas y el llamado a no reducir los procesos comunicacionales a los “medios de información”.

Sin la misma elaboración conceptual, estas ideas subyacen en muchos proyectos -como radios o televisoras- que se proponen comprender a la comunicación como el espacio de las conversaciones con las que construimos el mundo. Reproducimos aquí algunos fragmentos.

2.3

Imaginemos nosotros también -como lo han hecho tantos escritores- una variación al tema de Robinson Crusoe de Defoe (que a su vez es una variación al milenatrios tema del naúfrago: Noé, Ulises, Eneas, Gulliver, etc.). Imaginemos una isla llena de Robinsones, quienes por un extraño maleficio estuvieran en la más absoluta incapacidad de comunicarse. Ellos cohabitarían o coexistirían (proximidad en el espacio y en el tiempo), pero evidentemente no convivirían. Estarían “próximos”, más no serían “prójimos”. Un observador que los mirara desde un helicóptero pensaría seguramente que en la isla vive una sociedad de hombres, pero la inferencia sería del todo absurda, pues la incapacidad de saber-uno-del-otro y de comunicarse, impediría la formación de cualquier microestructura social. Entes incomunicados -aún en grupo- no pueden constituir formas sociales. Para que el hombre alcance su condición de “animal político” (esto es, de ser conviviente en una “polis” o ciudad), el requisito es que se ponga en acto o en práctica su virtualidad comunicativa, o posiibilidad de saber-del-otro y de hacer saber de él.

El latín y los idiomas romances han conservado, fortunadamente, el especial significado de un término griego (el de “Koinoonía”) que significa a la vez COMUNICACIÓN y COMUNIDAD. También en castellano el radical COMUN es compartido por los términos COMUNicación y COMUNidad. Ello indica a nivel etimológico la estrecha inherencia siempre establecida entre “comunicarse” y “estar en comunidad”, que no ofrece mayores dificultades a la comprensión por formar parte de nuestro bagaje lingüístico- conceptual. Se “está en comunidad” porque “se pone algo en común” a través de la “comunicación”. Lo que debe fijarse con claridad es la idea de que “poner en común” derechos y deberes, bienes y servicios, creencias y formas de vida (todo lo que constituye la esencia de la convivencia, de la comunidad y de la sociabilidad humanas), pasa por la capacidad previa de comunicarse, y depende del modo, forma y condiciones de dicha comunicación.

La Comunicación no es, pues, un epifenómeno agregado y sucesivo a la convivencia, sino un factum realmente esencial, intrínseco a la esencia misma del hombre como animal social, resultando poco pertinente, ingenuo o ideológimante mal intencionado reducirla a un discurso de comprensión de los medios.

(...)

2.4

De las innumerables formas, códigos y medios de comunicación entre los hombres: de la mímica al jeroglífico, de la obra de arte al lenguaje culto, de la señalética del boy scout a la simbología matemática, de la fotografía a la televisión, no todas facilitan una auténtica relación de comunicación en el sentido señalado anteriormente.

La relación de comunicación soberana y por excelencia es el DIÁLOGO; no el seudo-diálogo entre un padre autoritario y el hijo, el verdugo y la víctima, un anunciante de productos y el consumidor, un jefe de Estado y los periodistas en rueda de prensa oficial, sino el verdadero diálogo inter pares, en plena libertad, sin prevaricaciones ocultas o evidentes ni argumentos prohibidos, entre interlocutores no programados para COMPRENDER LA COMUNICACIÓN- FRAGMENTOS

Antonio Pasquali

12 de febrero de 2007

A fines de la década del ´70 el venezolano Antonio Pasquali escribió Comprender la comunicación, libro que desarrolla la diferencia conceptual entre “comunicación” e “información”. En ese recorrido, se destacan la noción de diálogo como intercambio bivalente entre las personas y el llamado a no reducir los procesos comunicacionales a los “medios de información”.

Sin la misma elaboración conceptual, estas ideas subyacen en muchos proyectos -como radios o televisoras- que se proponen comprender a la comunicación como el espacio de las conversaciones con las que construimos el mundo. Reproducimos aquí algunos fragmentos.

2.3

Imaginemos nosotros también -como lo han hecho tantos escritores- una variación al tema de

Robinson Crusoe de Defoe (que a su vez es una variación al milenatrios tema del naúfrago: Noé, Ulises, Eneas, Gulliver, etc.). Imaginemos una isla llena de Robinsones, quienes por un extraño maleficio estuvieran en la más absoluta incapacidad de comunicarse. Ellos cohabitarían o coexistirían (proximidad en el espacio y en el tiempo), pero evidentemente no convivirían. Estarían “próximos”, más no serían “prójimos”. Un observador que los mirara desde un helicóptero pensaría seguramente que en la isla vive una sociedad de hombres, pero la inferencia sería del todo absurda, pues la incapacidad de saber-uno-del-otro y de comunicarse, impediría la formación de cualquier microestructura social. Entes incomunicados -aún en grupo- no pueden constituir formas sociales. Para que el hombre alcance su condición de “animal político” (esto es, de ser conviviente en una “polis” o ciudad), el requisito es que se ponga en acto o en práctica su virtualidad comunicativa, o posiibilidad de saber-del-otro y de hacer saber de él.

El latín y los idiomas romances han conservado,

afortunadamente, el especial significado de un término griego (el de “Koinoonía”) que significa a la vez COMUNICACIÓN y COMUNIDAD. También en castellano el radical COMUN es compartido por los términos COMUNicación y COMUNidad. Ello indica a nivel etimológico la estrecha inherencia siempre establecida entre “comunicarse” y “estar en comunidad”, que no ofrece mayores dificultades a la comprensión por formar parte de nuestro bagaje lingüístico- conceptual. Se “está en comunidad” porque “se pone algo en común” a través de la “comunicación”. Lo que debe fijarse con claridad es la idea de que “poner en común” derechos y deberes, bienes y servicios, creencias y formas de vida (todo lo que constituye la esencia de la convivencia, de la comunidad y de la sociabilidad humanas), pasa por la capacidad previa de comunicarse, y depende del modo, forma y condiciones de dicha comunicación.

La Comunicación no es, pues, un epifenómeno agregado y sucesivo a la convivencia, sino un factum realmente esencial, intrínseco a la esencia misma del hombre como animal social, resultando

poco pertinente, ingenuo o ideológimante mal intencionado reducirla a un discurso de comprensión de los medios.

(...)

2.4

De las innumerables formas, códigos y medios de comunicación entre los hombres: de la mímica al jeroglífico, de la obra de arte al lenguaje culto, de la señalética del boy scout a la simbología matemática, de la fotografía a la televisión, no todas facilitan una auténtica relación de comunicación en el sentido señalado anteriormente.

La relación de comunicación soberana y por excelencia es el DIÁLOGO; no el seudo-diálogo entre un padre autoritario y el hijo, el verdugo y la víctima, un anunciante de productos y el consumidor, un jefe de Estado y los periodistas en rueda de prensa oficial, sino el verdadero diálogo inter pares, en plena libertad, sin prevaricaciones ocultas o evidentes ni argumentos prohibidos, entre interlocutores no programados para

respuestas estandarizadas, dispuestos a alcanzar dialécticamente una verdad superior a la de sus respectivos puntos de vista iniciales y en condiciones públicas o privadas elegidas sin coacciones. Sólo en el auténtico diálogo políticamente hablando, se dan por ejemplo las condiciones de una verdadera democracia (lo medular de un régimen verdaderamente democrático reside en el mantenimiento de un puro diálogo entre el Poder y una Opinión Pública libre, no contaminada por condicionamientos, coacciones, compulsiones o lavados de cerebros previos.)

Debe comprenderse con toda claridad que por razones técnicas y de uso político-económico, muchos “medios de comunicación” modernos impiden de hecho una auténtica “acción recíproca entre agente y paciente”. Si el teléfono sólo resta al diálogo la presencia gestual del interlocutor y algo de la calidad acústica de los mensajes (siempre y cuando no esté bajo control), la Radio y la Televisión en cambio, funcionan de hecho como diodos, esto es, como aquellos elementos electrónicos que sólo permiten el paso de los electrones en un sólo sentido, y no a la inversa. Radio y TV son “interlocutores” en un “diálogo” espurio en que sólo habla quien controla los medios, a una masa de “interlocutores” mudos que sólo reciben mensajes, sin contrarréplica. ¿Qué clase de “relación de comunicación” establecen, pues, la Radio y la TV? ¿Es ella auténtica “relación de comunicación”, o no será más bien una relación degradada a “relación de causalidad” con los contralores de los medios actuando como causantes de efectos que desean suscitar en el perceptor? ¿Podemos llamarlos propiamente “medios de comunicación”, o no deberemos acudir a fórmulas como “medio de información” o “medios de difusión” cada vez que la “relación de comunidad” degrada hacia una “relación de causalidad”? En tales casos, ¿el “mensaje” como trozo de diálogo, no quedará a su vez degradado a mera “información ordenadora” o “alocución”, forma de decir dando órdenes?

Esto suscita el problema de la gran ambigüedad y confusión en el uso de términos como “comunicación” e “información” que intentaremos despejar de la manera siguiente:

Es indudable que, tanto en el caso de la comunicación como de la información, existe un elemento común, que es un proceso de envío de mensajes. Mas para nosotros, Relación de comunicación sólo es aquella que -prescidiendo del medio o aparato empleado para facilitarla- comporta el uso de canales naturales en las fases extremas de envío- recepción, un proceso de elaboración ycomprensión mental del mensaje enviado- recibido, la producción de efectos de convivencia, y una situación de auténtica acción recíproca entre agente y paciente (entre transmisor- receptor de mensajes o interlocutores).

(...)

Por INFORMACIÓN debe entenderse todo proceso de envío unidireccional o bidireccional de información- orden a receptores predispuestos para una descodificación- interpretación excluyente, y para desencadenar respuestas

preprogramadas. Un doble flujo de comunicaciones no es aun comunicación.

(...)

COMUNICACIÓN es la relación comunitaria humana consistente en la emisión-recepción de mensajes entre interlocutores en estado de total reciprocidad, siendo por ello un factor esencial de convivencia y un elemento determinante de las formas que asume la sociabilidad del hombre. •

Tomado de Pasquali, Antonio. Comprender la comunicación. Caracas, Monte Ávila Editores, 1990. Págs 43 a 52.



martes, 7 de abril de 2009

Evaluación del Módulo II: Grupos, instituciones y redes sociales en contexto

UNIVERSIDAD NACIONAL DE SALTA
FACULTAD DE HUMANIDADES
CENTRO DE INVESTIGACIONES
SOCIALES Y EDUCATIVAS DEL NORTE ARGENTINO
POSTITULO DE ACTUALIZACIÓN Y ESPECIALIZACIÓN EN EDUCACIÓN RURAL E INTERCULTURAL
Res. H. 682/08 (Expediente 4288/08)

Evaluación del Módulo II: Grupos, instituciones y redes sociales en contexto (Módulo II del POSTITULO EN EDUCACIÓN RURAL E INTERCULTURAL. Res. H. 682/08).
CONSIGNA: En grupo, realizar una descripción detallada y un análisis de su establecimiento educativo.

De la descripción: Para realizar la descripción tener en cuenta los siguientes ítems, los que deben servir de guía. Uds. podrán incorporar otros:
Organización
Características de la gestión
Tareas
Descripción edilicia
Recursos materiales y didácticos
Tiempos y espacios
Agrupamientos
Personal (docente, no docentes y administrativos)
Matricula
Relaciones interpersonales
Relación escuela y comunidad
Proyectos institucionales y/o específicos
Estructura curricular

b) Del análisis: A partir de la bibliografía aportada en el módulo II, realizar el análisis institucional. Tener en cuenta a la hora del análisis:
Crisis y conflictos
Relaciones de poder
Estilo institucional
Condiciones y resultados
Lo grupal
Dinámica institucional y funcionamiento institucional
Instituido - instituyente

Fecha de entrega: 25 de abril
Enviar trabajo al correo de la tutora respectiva o sino al correo del postítulo: postitulorural@yahoo.com

lunes, 1 de diciembre de 2008

Orientaciones I

Especialización en Educación Rural e Intercultural

En esta carrera, la acreditación final se realiza con un trabajo en terreno, sobre una institución previamente convenida. Como preparación para dicha tarea, le acercamos una secuencia recomendada de actividades.
Le aconsejamos tener carpetas de registro diferenciadas para :
a) El cuaderno de campo, donde registrará datos y vivencias
b) Las fichas bibliográficas que facilitarán la interpretación
c) Las actividades vinculadas al trabajo en terreno

Orientaciones iniciales para el trabajo en terreno
En primer lugar hará una observación abierta (densa), lo más amplia posible, como si Usted fuera un visitante extranjero que llega a la zona – desde un país alejado y exótico- por primera vez.
I.- Recorridos abiertos: En dos momentos bien diferentes del día(el mismo o en diferentes días) para captar facetas de la vida cotidiana.
En cada uno de esos momentos:
a) recorrer primero los alrededores, luego la institución y sus instalaciones - sin tomar notas durante el recorrido- para poder concentrar su atención en captar - con ojos de extranjero- la mayor cantidad de detalles posibles.(Es interesante demorar la mirada en los espacios, los colores, los movimientos de la gente, sus expresiones, ....en los lugares de paso, en los de encuentro)
b) Terminado el recorrido, anotar en el cuaderno de campo los detalles que recuerda, por otra los pensamientos y emociones que se asociaron a lo que se estaba viendo, oyendo, oliendo, etc.
II- Recorrido con registro simultáneo
Ahora tendrá que elegir: (a) la hora del día en que se apreció un mayor movimiento o un movimiento más interesante para usted o (b) un día y una hora en que sabe que van a ocurrir acontecimientos de interés . En el día elegido
c) hacer una última recorrida tomando notas –A MEDIDA QUE RECORRE- de todos aquellos puntos, hechos, cuestiones que le resulten llamativas, importantes, significativas , etc.

Las cuestiones a considerar a partir de lo observado y registrado en las recorridas
(ordenamiento de la información)
-Información sobre la institución en el contexto actual
1. Características de la zona en que está ubicada y condiciones de la población que atiende
2. Características de la vida cotidiana de la zona en que está inserto el establecimiento ( costumbres habituales en las diferentes áreas de la vida social: vivienda, salud, educación, trabajo, recreación, creencias , filiaciones etc.)
3. Relación de la organización con otras del mismo tipo y con otras instituciones de la comunidad Caracterizar las otras instituciones y asociaciones
4. Valor, imagen, prestigio que la comunidad asigna al establecimiento (la comunidad inmediata y la más amplia)
5. Otros aspectos relevantes

-.Información sobre la institución en la historia
6. Los antecedentes de la creación (la pre- historia)
7. La fundación: año, demanda a la que se quería responder, características de los fundadores, características del proyecto original
8. La historia: los hitos significativos, los hechos memorables, los hechos olvidados, los momentos recordados como críticos. Las personas recordadas (sus rasgos
9. otros rasgos relevantes.

-Información sobre la organización en sí
Las características más relevantes de:
10. su espacio ( el edificio, las instalaciones y equipamientos, su aspecto estético, su condición de mantenimiento y cuidado).
11. su organización del tiempo ( anual y diaria) Sus tiempos “difíciles”
12. las personas que lo forman: número y características de los ocupantes de cada una de las posiciones institucionales (directivos, docentes, técnicos, auxiliares,etc).Número, composición y características de los alumnos.
13. Su proyecto actual: los ideales, los propósitos y metas, el currículo, las aspiraciones y proyectos de cambio.
14. Los sistemas de organización: la selección y socialización de las personas, la distribución de responsabilidades, las normas, los premios y castigos, las formas establecidas de comunicación y trabajo colectivo.
15. Su cultura: los valores y modelos comunes, las concepciones y representaciones. Las leyendas institucionales. Los objetos representativos de su cultura singular. Rasgos de las culturas profesionales de los miembros. Los contenidos imaginarios que parecen adscriptos a la organización (especifique los aspectos de la realidad que muestran esto)
16. Su estilo de funcionamiento: Los modos habituales de trabajo. Los modos habituales de enfrentar dificultades y emergencias. “Dificultades y problemas crónicos”. Clima y ritmo de la vida cotidiana. (especifique los aspectos de la realidad que muestran esto)
17. Las relaciones de las personas con el establecimiento: grado de compromiso y formas en que se expresa. Valoración. Puntos de tensión y frustración que provoca la tarea, la relación con los otros, las condiciones, etc. (especifique los aspectos de la realidad que muestran esto)
18. El modo en que cada persona ve su rol, cada uno de los otros roles, el establecimiento en sí, las dificultades y sus causas, la calidad de los resultados institucionales, etc.
19. Los resultados institucionales: tipo y características de los logros.